Como segundo paso y en paralelo al plano de la memoria se realiza la maqueta de todo el colegio. Se entiende como una forma de análisis y reflexión crítica sobre los espacios que habitan en esta etapa de formación. Se pretende introducir al alumno en el concepto de la escala y la visión espacial aumentando además sus destrezas manuales.
La maqueta, en cualquiera caso, es un elemento de juego y de reflexión común entre los alumnos. De la misma manera que el juguete, la maqueta fomenta el trabajo en equipo y la colaboración.
El detalle de la maqueta permite observar ya algunas de las preocupaciones más evidentes. La principal es la necesidad de unir los dos edificios destinados a aulas con una pérgola a cubierto así como la posibilidad de llegar a la casa del maestro bajo techo y poder reutilizar
el edificio como comedor escolar.
Aparece también el interés por la recuperación de áreas infrautilizadas dentro del complejo y la problemática debida al tendido aéreo de instalaciones o la presencia de un transformador próximo a la puerta de entrada actual del colegio. En la actualidad están realizándose las gestiones necesarias para lo enterrado del tendido y el traslado del transformador.
Existe por tanto un deseo claro de recuperar la unidad del complejo y evitar distinciones entre lo nuevo y el viejo o entre las aulas y la casa del maestro. Todo es una escuela.